LA COLECCIÓN MÁS GRANDE DE AUTOS CLÁSICOS

La puerta se abría lentamente y el brillo dis­persaba la entrada, se podía ver la emoción de un hombre que ha tenido la afición por coleccionar y reconstruir autos por más de 40 años. Toda su vida estuvo involucrado en el mun­do automotriz y también desde niño vio que en casa su padre poseía autos de la época, así nació el interés y el gusto que se mantienen vivos has­ta la actualidad, teniendo alrededor de 80 autos que se han convertido en una gran colección de clásicos.

Carlos Larrea, un hombre conocido a nivel local y nacional no solo por sus negocios automotrices,  sino también, por su fuerte pasión por coleccio­nar autos clásicos. Comenzó con este entusiasmo a finales de los años 80’, cuando tenía 30 años de edad. Los dos primeros autos que conforman su hoy conocida colección fueron un Ford del año 1947 y una camioneta GMC del año 1955; así de apoco y con el apoyo y pasión de su hijo, la men­cionada colección ha ido creciendo hasta llegar a lo que hoy es “La Cochera Carlos Larrea Torres”.

Después de algún tiempo que comenzó con su ilusión por coleccionar, la familia creció y así nace su hijo, mismo que se dedicó al deporte tuerca, participando en las emocionantes y conocidas competencias automovilísticas, no solo en Am­bato si no en a nivel nacional, dejando de esta  manera en alto su nombre y el de su padre y a la vez el de la cuidad que los vio nacer.

El cariño hacia sus autos es notable, su sonrisa proyecta gran emoción. Afirma que de toda la co­lección existen alrededor de 10 autos que no los vendería por nada del mundo, entre ellos están un Porsche del año 1974, un Ford de 1947, un BMW M3 y unos carros de carreras que los ha restaurado y son parte de ese grupo privilegiado que no están ni estarán a la venta. Indica también, que siempre le han gustado las camionetas americanas, es por eso, que como parte de la colección están 10 ca­mionetas que las conserva impecables, en buen estado y con el mayor de los cuidados.

Un dato curioso es que Don Carlos siempre ha tratado de tener carros que sean de la misma ciudad donde nació, conociendo su historia, sus dueños, y en muchas ocasiones han sido vehícu­los de personajes reconocidos, autoridades, co­rredores de carreras, y es más hasta autos que han ganado alguna competencia como por ejem­plo del Sr. Francisco Sánchez, Sr. Manuel del Car­men Pachano y demás. Es considerable el número de autos que son de la ciudad Cosmopolita, pero también tiene autos de otras ciudades como Qui­to, Cuenca y más.

Todos y cada uno de los autos los mantiene en buen estado y funcionando correctamente, ya que, cada quince días realiza la limpieza del gal­pón donde reposan a diario los autos para pro­tegerlos del sol y demás factores climáticos que puedan afectar el estado original del vehículo. A cada ejemplar los limpia con aire y después con microfibra, para de esta manera mantener cada auto flamante y en perfectas condiciones.

El apoyo familiar es importante para que se man­tenga la pasión, y no se pierda el legado que a pulso Carlos Larrea ha ido formando, es por eso, que él siente gratitud y cariño. Mirar su colección es ver su trabajo, tiempo y dinero invertido, es ver una pasión que a pesar del paso de los años sigue viva y con más intensidad, es recordar mu­chas historias y sobre todo es reconocer y valorar los años de esfuerzo y entrega.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat
💬 ¿Necesitas ayuda?
Bienvanido(a) a Revista Negocios
¿En qué podemos ayudarte?