La Educación Técnica y Tecnológica, como promotora de desarrollo económico e inclusión social, ha tomado relevancia en las políticas públicas de la región Sierra centro en los últimos años.
Este nivel de preparación apareció como una alternativa para aquellas personas, que por diferentes razones, buscan una incorporación temprana a los mercados laborales. También permite a las autoridades cumplir sus objetivos de incrementar la tasa de empleo y capacitación de los estudiantes de manera que puedan influir en la productividad y mejorar la calidad de artículos y empresas, según una investigación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Actualmente en el Ecuador, la importancia de la educación técnica y tecnológica es cada vez más reconocida por estudiantes, empleadores y comunidad en general, debido a su orientación hacia la producción y la oferta de servicios que redunda en el desarrollo del país a través de la atención prioritaria a la sociedad.
Según Benjamín Anilema, director de un Instituto Tecnológico Superior, el paradigma de que la educación universitaria es mejor se va en retrospectiva y también en prospectiva, hacia el reconocimiento de la trascendencia de estas carreras que dirige a sus estudiantes con ventajas superlativas como la formación eminentemente práctica.
La práctica pre-profesional, señala, se ejecuta desde el primer semestre de estudio, lo que constituye un valor agregado muy importante que conecta adecuadamente la teórica, que se imparte dentro de la institución, con la práctica que se desarrolla en diversas instituciones o empresas. “Cada estudiante se va formando en un ambiente educativo prelaboral desde el inicio de su quehacer”, dice.
En la carrera de Técnico Superior en Enfermería, por ejemplo, la preparación que parte con el examen de admisión y nivelación, prepara al estudiante con prácticas preprofesioanles.
Ellos terminan sus estudios con un seminternado realizado, especialmente, en instituciones del Ministerio de Salud donde ejecutan labores inherentes a lo que va a ser su desempeño laboral. Hacen su trabajo de graduación y están listos para irse insertando en instituciones tanto públicas como privadas.
Los jóvenes que optan por este tipo de preparación deben cumplir con los requisitos establecidos por la ley, que constituyen, entre otras cosas, cursar los sistemas de igualación y admisión.
EVALUACIÓN INSTITUCIONAL
A concepto de Anilema, el sistema de valoración al cual rinden estas instituciones educativas ha sido un factor fundamental para que tomen mayor fuerza y responsabilidad; pues en este momento tienen como cultura propia la evaluación y la auto evaluación institucional.
En el 2010, manifiesta, empezó un proceso de valoración que se formalizó a partir del 2013 bajo la tutela del ex CEASES para categorizar a los planteles. En ese año el Instituto Stanford tuvo un puntaje de 96 sobre 100, ubicándose en el segundo puesto a nivel nacional.
Esto comprometió a la institución en los procesos y perspectivas educativas y, asimismo, coadyuvó a que los técnicos y tecnólogos que egresan de los liceos salgan con medidas evaluativas exigentes.
Además, se involucró muchos parámetros de calificación que exigieron el fortalecimiento de las instituciones a través de procesos internos y externos lo que ayudó a que los estudiantes obtuvieran todas las herramientas necesarias para desempeñarse adecuadamente en el mercado laboral.
Pese a todo esto, según el directivo, aún queda camino por recorrer en el proceso de concienciación del valor de la educación superior técnica. En países como Alemania, dice, los tecnólogos son reconocidos y contribuyen enormemente con el desarrollo del país.
Alemania es una potencia mundial que se ha fundamentado en la preparación y reconocimiento de los tecnólogos. Allá los salarios no tienen mucha diferencia con los profesionales de grado porque esa es la mano de obra calificada que saca adelante a los países y eso es lo que requiere el Ecuador.
No obstante, subraya, es necesario reconocer que el Gobierno ha dado grandes aportes a la educación técnica y tecnológica con las reformas a la Ley de Educación Superior del 2018 que reconoce a los títulos como de tercer y faculta a los estudiantes a cursar estudios de cuarto nivel. Hoy la ley establece las especializaciones tecnológicas y maestrías tecnológicas que son valores agregados para cimentar aún más la calidad de los estudiantes.
Para que un centro oferte especializaciones o maestrías deberá entrar a una evaluación y calificación que lo catalogue como instituto universitario y luego aprobar aspectos específicos de la Ley de Educación, misma que al momento es analizada por parte de las autoridades pertinentes con el objetivo de establecer los parámetros de las denominaciones y los alcances de las maestrías que se establecerán a futuro.
Pese a esto, muchos jóvenes ingresan a los institutos preuniversitarios, que trabajan casi como un negocio, una y otra vez con el objetivo de lograr un cupo en la universidad, frente a esto el director sostiene que la calidad educativa, la preparación y la práctica es lo que da una oportunidad a futuro.
Hay que recordar, expresa, que penosamente en el país existe un gran porcentaje de profesionales de grado que no han logrado ubicarse en las labores productivas de acuerdo a su perfil profesional; eso quiere decir que hay profesiones saturadas lo que obliga a las instituciones educativas a ofertar carreras que garanticen un lugar de trabajo.
En este momento, agrega, de acuerdo a los estudios realizados al interior de la institución, el 90 por ciento de nuestros estudiantes están ubicados especialmente en labores inherentes a su preparación profesional lo que nos satisface enormemente porque ese es uno de nuestros objetivos.
Ingresar a un instituto técnico o tecnológico es una buena opción, reitera, debido al corto tiempo de preparación del estudiante, quien al terminar su estudio está listo para ejecutar todos los procesos operativos que requiere cualquier institución pública o privada.
NUEVAS CARRERAS TÉCNICAS
Considera que en el país hay algunas carreras que aún están por aprovecharse y otras que no es tiempo de explotarlas porque el nivel de conocimiento social y de necesidad del país no lo requieren; no obstante, cree que hay nuevas opciones como la robótica que en un futuro próximo estarán listas para ser ofertadas adecuadamente.
Una de las profesiones que tiene poca demanda actualmente en el Ecuador es la de Técnico Superior en Odontología. En países desarrollados es sustantivo el proceso de admisión integral que tiene esta área; en el país no existen muchos de estos profesionales, asegura.
“En el país existe una enorme incidencia de problemas de salud bucal a lo que estamos listos a aportar con la preparación de estudiantes en labores de asistencia integral en técnicas odontológicas como radiografía dental, asistencia en cirugía, procesos de radiología y cuidado del paciente, entre otras”, expresa.
La falta de este tipo de profesionales ha llevado a que los médicos odontológicos sean asistidos por gente que no tiene una preparación adecuada lo que limita la cantidad y calidad del servicio al usuario que un centro odontológico puede brindar.
A los jóvenes que se inclinan por una carrera tecnológica recomienda que analicen en primera instancia su vocación científica porque es muy importante que amen su trabajo ya que esto les va a permitir ver la proyección de su cargo con una mayor riqueza y van a realizar sus tareas con gusto; se van a sentir bien y por ende van a tener un crecimiento más alto y mayores oportunidades en la vida.
El papel de los institutos está siendo cada vez más reconocido y cada vez se inscriben mas estudiantes no solo en Riobamba sino a nivel del país porque se ha visto que esta es una opción muy eficaz y adecuada; creo que esta es la opción en la que tiene que encaminarse el Ecuador toda vez que somos un país en vías de desarrollo y lo que necesitamos es mano de obra operativa calificada.
SISTEMA DE BECAS
Esto permite que chicos de todo estrato social accedan a estudiar, en nuestro caso tenemos incluso política de becas que van desde parciales hasta totales. Somos una institución inclusiva y tenemos la riqueza étnica que es importante para el crecimiento heterogéneo de las instituciones educativas; esto es fundamental porque aporta otros ingredientes que son parte del proceso educativo.
Sobre los centros de capacitación, Anilema añade que toda capacitación que se realice guardando el proceso ético es adecuada. El ser humano debe estar predispuesto a capacitarse de la mejor manera posible. Creo que los procesos académicos que vayan en procura de mejorar el sistema educativo van a ser saludables.
El Instituto Superior Tecnológico Stanford en sus 23 años de vida bajo la rectoría del Ministerio de Educación y en el año 2001 fue elevado a la categoría de Tecnológico Superior. Actualmente cuenta con más de 500 estudiantes y trabaja en la innovación de carreras de acuerdo a las necesidades de la población, en enfermería, Odontología, Desarrollo Infantil Integral, Redes y Telecomunicaciones.