Desde niño tuve afición por la madera, construía cosas con retazos provenientes de talleres pequeños, cercanos a donde vivía. Hacía carros de palo, costureros, calados en madera, desde que estaba en la escuela”, comienza contando el Arq. Esteban Abad, Gerente de la empresa cuencana de mobiliario “Burgués”. Cuando estudiaba arquitectura, antes de graduarse -por una necesidad- salió el emprendimiento que para ese entonces entendió como una oportunidad de trabajo: quería renovar la cocina de su mamá. Cotizando, el costo resultaba muy alto. Pero más que quejarse del precio, vio una oportunidad de negocio. “Hice la primera cocina para mi madre, luego para mi tía, y así empecé a desarrollar más trabajos, más contratos, abriéndome al interiorismo con diseños para bancos, agencias de viaje, locales comerciales. Empecé así a trabajar en diseño interior, aplicado al mobiliario”, dice el Arq. Abad.
En la empresa cuentan con carpinteros y ebanistas que -a decir del Arq. Abad- son una “raza” casi extinta, muchos han migrado o la siguiente generación no se dedicó a lo mismo.
ABRIR CAMPO
Todo fue producto de una necesidad, como punto de partida, y luego un crecimiento continuo. Burgués empezó hace 25 años, con dos máquinas, con un maestro -que aún trabaja en la empresa y que ahora es jefe de planta- además un ayudante. En la casa del maestro se adaptó un espacio para taller. El Arq. Esteban Abad rememora: “Era un zaguán, que luego lo amplié, después arrendé un terreno al frente, y finalmente compré otro terreno, donde ahora funciona la nave industrial. Constituí la empresa, porque al principio estaba sólo mi nombre, manejaba el negocio como artesano. Ahora somos una empresa de 100 personas entre directos e indirectos.”
Han realizado trabajos que les han pedido por referencia, de Guayaquil, Quito, Loja, Machala. Han trabajado el diseño de mobiliario en locales comerciales, como el caso de la cadena Las Fragancias, para quienes han efectuado el trabajo en más de 50 locales, a nivel nacional. Después se generó la línea de mobiliario de cocina y directamente mobiliario para construcción (closets, puertas, pisos de madera, muebles de entretenimiento, unidades de trabajo). “La intención es que un constructor contrate con nuestra empresa toda la carpintería, solucionarle la vida. Esa ha sido una característica por la que la gente sigue acudiendo a nosotros. Y el cumplimiento, es clave. No saco nada consiguiendo un contrato o promocionándome si a la final quedo mal, ese cliente no me va a dar trabajo nuevamente. Esto se riega, el resto no querrá contratar a la empresa. El cumplimiento es uno de los valores agregados que nos ha mantenido con clientes cautivos”, señaló el Arq. Abad.
TIEMPOS DUROS
Esteban Abad expresa: “Los problemas y temores siempre van a existir. Hoy, percibimos una incertidumbre grande de qué pasa y qué pasará. Tuve la suerte de empezar de cero, eso nos da experiencia. Todo ha sido producto de un crecimiento, de trabajo, y del equipo de trabajo, gente fiel que está involucrada en la empresa”, señala el Gerente de Burgués. Manifiesta que tiene cero reclamos laborales en toda su trayectoria. Ante la pregunta “Cómo se logra eso?”, nos supo contestar: “Con fidelidad, cumpliendo a la gente. Esto es una familia, no es una empresa. Eso permite mantenerse estable. Ahora mi hermana mayor también trabaja conmigo”.
AMENAZAS
El análisis de factores amenazantes, para los empresarios implica varios puntos. El Arq. Abad apunta: “Hoy en día hay competencia desleal, nosotros somos una empresa formada, los organismos de control utilizan un 35% de nuestros recursos, otras empresas que no tributan eso vuelven injusta a la competencia. El mercado es variante, el tema cartera es otro problema. Los contratos que estamos haciendo son de hace uno o dos años, sin embargo los constructores de las obras que tenemos en curso, ya no están proyectándose, están en un stand by por el panorama político, pues hay asuntos que les afectan directamente (plusvalía, herencia) y todos estamos en la cadena. Obviamente la liquidez también es un problema ahora. Pero somos una empresa sólida, con fábrica propia, hay un respaldo. La intención es mantenernos y crecer.”
DESAFÍOS
La empresa Burgués no tenía necesidad de insertarse en proyectos masivos, pero el segmento de mercado exclusivo se hace cada vez más pequeño. Se ha expandido el mobiliario económico. “Hay proyectos habitacionales masivos, en los que nos toca competir con fabricantes informales, tableristas, que tienen precios súper bajos y tenemos que entrar ahí porque en realidad el porcentaje mayoritario de obras está en ese segmento”, explica el Arq. Abad. Si el constructor quiere minimizar precios, tienen que hacer una línea económica, utilizar materiales que se acoplen a ese presupuesto, instalaciones rápidas, pensar en hacer un sistema en producción que permita optimizar recursos y tiempo. Siempre hay un plan B: “Dicen que en toda crisis hay una oportunidad, hay que pellizcar un poquito los espacios que quedan, abrir los ojos y ver necesidades”, menciona.
Para el Gerente de Burgués, el compromiso es fundamental, tanto con su equipo como con los clientes. “Compromiso también significa que si hicimos un trabajo y luego de años se le rompió la puerta a un mueble, lo cambiamos. Es un servicio, el feedback que tenemos con nuestros clientes, porque más que un cliente es un amigo.”