Aplicación disruptiva, Club Visita mueve a la industria turística

“La grandeza de las empresas
no está en cuantificar lo que
producen, está en cualificar lo
que aportan.”

Si hablamos de un timeline, Club Visita nace hace 20 años como Ecuaventura.com, luego migran a Visita Ecuador, nombre con el que se mantuvieron por muchos años y se posicionaron como marca. Hace poco evolucionaron a Club Visita. En el origen, fue un portal de información, con la mágica propuesta de vivir una aventura en el país. Después se generó el club de viajes con el que se configuró un nuevo modelo de negocio, basado en suscripciones y precios interesantes, contundentes. Actualmente, el giro ha variado y la palabra clave de Bernardo Polo -el visionario detrás de todo esto- es disruptivo.

“Hoy nos parecemos a Netflix, un sitio de contenido, con un giro disruptivo, con la intención de romper el esquema tradicional de una secuencia lógica. Club Visita causó eso en la industria de la hotelería y el hospedaje. Con 20 años de experiencia, nos hemos apegado a las tendencias, y hoy por hoy somos un sistema que se puede manejar directo desde el celular. Cualquier persona puede bajar nuestra aplicación y comprar con su tarjeta de crédito nuestra suscripción,” señala el CEO de la empresa. A la fecha, el número supera los setenta mil suscriptores, que ahorran en sus viajes.

Desde sus inicios, la empresa ha marcado pautas y primicias. De 1999 al 2005 fueron el primer portal de información turística del país. En aquel momento recopilaban todos los datos del Ecuador, sus destinos y atractivos. En el 2006 pasaron a ser un club de viajes, por el que pusieron al comprador y vendedor cara a cara, el hotelero y el consumidor bajo un modelo de franca desintermediación. Club Visita acaba de lanzar su aplicación, por la que el usuario reserva directo al hotel, esto hace que la cantidad y calidad de servicio de los prestadores sea más dinámica, de cara al consumidor. Se logra un mejor precio, mejor trato y una dinámica más ágil en el procedimiento de reservas. La empresa está abordando la posibilidad de expansión a nivel mundial. Tienen inventario en cinco países: Ecuador como eje, Colombia, Perú, Panamá y EEUU. Al momento, están presentando su servicio a los ecuatorianos que radican fuera, con la meta de dinamizar el turismo.

Como buen conocedor de negocios, debíamos preguntar a Bernardo Polo sobre la diversificación. “Debe producirse en función de negocios que estén relacionados. Nuestra visión es estar dentro del giro del negocio del turismo, es una visión 360. Incorpora reservas, hotelería, alimentación, desplazamiento. Nuestro holding de empresas ha diversificado: el club de viajes Visita Ecuador, Full Vacations que tiene una oferta de hoteles únicamente en Ecuador, el sistema de hoteles rewards que es un programa de fidelización creado para el cliente interno de las empresas, una empresa de call center con la que manejamos la relación con el consumidor directamente. Nuestro hotel, la pizzería, entre otros… Están correlacionados, la idea es que se cree un sistema organizado, productivo. No quiero decir que el éxito esté asegurado, pero al diversificar dentro de la misma rama, la posibilidad de error se disminuye”, comparte el empresario.

Y, ¿qué hay con los peces grandes que se comen a los chicos? Bernardo responde a la popular analogía con su propia filosofía: “En el ecosistema marino todos conviven. Dicen que los grandes se comen a los pequeños, sin embargo, los tiburones y ballenas conviven con peces pequeños o parásitos y generan un ecosistema. La visión es más acertada al entender que el pez pequeño puede formar un cardumen. En mi percepción, creo que el volumen de consumidores le torna competitiva a cualquier empresa. Recordemos que Facebook fue muy pequeño y hoy es grande.

La posibilidad de que el pez se vuelva grande y fuerte, existe. Me atrevería a plantear que esta analogía es acertada en virtud del crecimiento del pez, no de la comparación del uno y el otro. En las empresas, las posibilidades están ahí, depende de la visión, el esfuerzo, la perseverancia. El papel más importante que tiene que cumplir un emprendedor no es tener la idea, es la esperanza y el tesón, que contribuyen para llegar a sus objetivos. Luego de años de haber desarrollado Club Visita puedo entender que si uno no da el máximo esfuerzo cada día, no va a conquistar una meta ni siquiera grande- una meta per se. Las cosas grandes dependen de la perspectiva. La grandeza de las empresas no está en cuantificar lo que producen, está en cualificar lo que aportan”, reflexiona.

Bernardo habla con convicción y pasión. Asegura además, que si cabe una reflexión como emprendedor, como empresario, como visionario, es que las ideas deben aterrizar en la práctica con trabajo en grupo. “Que la idea sea compartida con el equipo humano, que crean en esa idea y en función de esa idea lograr objetivos sistemáticos, con el tiempo se consolida en resultados. Recuerdo cuando la empresa soñaba con tener un producto, hoy somos un holding de empresas, y seguimos soñando en concebir y mejorar un producto que se internacionalice, conquistar un mercado dinámico”, acota Polo. Con varios reconocimientos bajo el brazo, la empresa de promoción turística, desplazamiento y viajes, sigue creyendo en el Ecuador, en las buenas ideas y la necesidad de reinventarse.

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