La caída generalizada en las bolsas de valores preocupa a los expertos, ya que puede ser un fuerte síntoma de una futura recesión y crisis económica global que se avecina.
El día lunes 5 de agosto se dio la más fuerte caída en las bolsas de valores alrededor del mundo desde la pandemia de COVID en 2020. Esta situación, de manera inmediata, redujo el precio del petróleo, otras materias primas y las criptomonedas, lo cual preocupa mucho a los expertos, ya que puede ser un fuerte síntoma de una futura recesión y crisis económica global que se avecina.
Aquí están tres puntos clave para entender la caída en las bolsas de valores y la posibilidad de una recesión global.
1.- Inestabilidad crónica en los mercados y las economías
La razón principal por la cual se teme que una caída generalizada de las bolsas pueda llevar a una crisis global está en el alto endeudamiento público y la fragilidad de la casi totalidad de economías alrededor del mundo. La deuda pública global para 2023 se estimó en 97 mil billones de dólares, 3,9 veces el PIB mundial (Figura 1). Siendo Estados Unidos la economía con más deuda pública del mundo, con una suma que asciende a 1,27 veces su PIB.
En este contexto, en la mayoría de países alrededor del mundo, los gobiernos no tienen dinero para invertir en educación, salud y vivienda para su población, teniendo en cambio que subir los impuestos, lo que ha deteriorado la calidad de vida de las familias y lleva a economías donde se consume poco y las ventas de las empresas caen.
2.- Burbujas especulativas en el sector tecnológico
La caída en las bolsas a nivel global se da debido al temor de una posible recesión en Estados Unidos, la primera economía mundial. Esto se produce a causa de los informes presentados por la mayoría de las grandes empresas tecnológicas que mostraron pérdidas importantes y caídas en el precio de sus acciones. Las acciones de Intel cayeron un 30%, teniendo que reducir 17 mil puestos de trabajo; Nvidia sufrió una caída del 10% en sus acciones; Alphabet, la empresa dueña de Google, tuvo una caída del 4,5% y Apple del 3%.
Esto es un serio problema debido a las inmensas inversiones realizadas en estas empresas tecnológicas en los últimos años, que fueron impulsadas por la novedad de la Inteligencia Artificial. En 2021, estas empresas invirtieron 276 billones de dólares en el sector de tecnologías emergentes de IA generativa (Figura 2). Estas inversiones ahora no necesariamente tendrán una rentabilidad asegurada y, al ser estas las empresas más importantes de la economía estadounidense, se teme que esto desestimule la economía, la inversión y el empleo en el país, lo cual podría llevar a una crisis global.
Fuente: NetBase Quid Informe de Índice de IA 2023
3.- Una crisis global futura es inminente
Durante la pandemia de 2020, la mayoría de economías sufrieron pérdidas de gran magnitud de las cuales solo pudieron recuperarse en base a la emisión de moneda, reducciones de impuestos y el aumento del gasto público. Estas fueron soluciones a corto plazo que ayudaron a sacar a flote a las economías para 2021.
Sin embargo, desde entonces, todos los indicadores muestran que nos acercamos a una recesión global, ya que hay aumento del desempleo, caídas en la producción industrial, reducción en el comercio internacional, problemas en la cadena de suministros y pérdidas de la confianza de los consumidores y empresarios.
Pero quizá la más clara señal de esta crisis es la valorización del oro como inversión en los últimos años, el cual es un activo refugio. Esto indica una tendencia hacia la contracción de la economía mundial, respaldada por el bajo crecimiento de las economías más desarrolladas, lo que provocará una disminución en la demanda global de bienes y servicios.
Por lo que parecería que se vienen tiempos difíciles, ya que una crisis global hoy o en poco tiempo es inminente.